lunes, abril 17, 2006

La curiosidad mató al gato...



Por qué será que todos somos tan "curiosos" y nos gusta saber qué es lo que hace el de al lado, a poco no te intrigarías si después de un largo día vas manejando a casa, voletas y lo primero que ves es a una señora llorando en el auto, manejando con tanta resignación que quieres saber qué le pasó, pero si intentas acercarte para ayudar, se hace la loca y en la primera oportunidad mete el acelerador a fondo hasta huír por completo, ahh pero te quedas con sentimiento de culpa y lo único que haces el resto del camino es pasar por muchas emociones, como indignación, porque seguro el marido le puso el cuerno, luego, la compadeces porque tal vez se murió un pariente, o será que está perdida y no tiene idea de cómo regresar a su casa, puedes imaginar miles de cosas, pero la curiosidad no te deja en paz y se lo cuentas a todo mundo para encontrar la respuesta, esa curiosidad insitente no te deja ser feliz, sólo hasta que tu pasas por lo mismo, ahora tú eres la que va llorando y los demás conductores te compadecen, ahora tú eres el motivo de esa curiosidad que los agobiará el resto de la semana.

Y aunque muchos consideran que la curiosidad mató al gato, yo creo que es una necesidad vital, "cultivemos el gozoso ejercicio de ser curioso".

1 comentario:

Nacho dijo...

Ser curioso no es ser metiche. Estoy deacuerdo contigo mi querida galletica.