viernes, octubre 21, 2005

¿Por qué una rica galleta y un nutritivo vaso de leche no pueden convivir?


¿Valdrá la pena pasar tanto tiempo dicutiendo si es la galleta la que no tolera la lactosa o es la lacotsa quien poco a poco desintegra a la galleta? Aquí ¿quíen es la culpable?

En realidad ninguna, simplemente las circunstancias no les permiten mezclarse, tomando en cuenta que desde su origen han sido diferentes en composición y estructura.

Hace algunos años se decía que el rechazo era inminente, imposible de modificar, pero gracias a los avances día a día y a muchas organizaciones e instituciones se han enfocado esfuerzos para lograr su convivencia, inventando fórmulas como la leche deslactosada y así generar la tan deseada tolerancia.

Entonces, si es tan fácil generar fórmulas para la tolerancia...
¿¿¿Por qué seguimos así???